Inicios de Camponaraya
La fundación de las localidades de Campo y Naraya, así como del resto de pueblos que conforman el municipio se dataría en la Edad Media, cuando habrían sido creadas en los procesos repobladores llevados a cabo por la monarquía asturleonesa, quedando integrados en el Reino de León desde su nacimiento. En este sentido, Campo y Naraya estuvieron vinculadas al Monasterio de San Julián de Samos durante los siglos XI y XII, pasando a depender más tarde del Monasterio de Santa María de Carracedo.
El origen de Camponaraya se remonta al siglo XV cuando dos pueblos, Campo y Naraya, separados por el arroyo Naraya se unen como población uniendo también sus nombre, definición con esta unión lo que se conoce desde entonces como Camponayara.
En la Edad Contemporánea, en 1821, Camponaraya pasó a formar parte de la provincia de Villafranca, si bien, al perder ésta su estatus provincial al finalizar el Trienio Liberal, en la división de 1833 paso a estar adscrita, de nuevo, a la provincia de León.
En un fértil paraje de viñas y naturaleza, Camponaraya está geográficamente enclavada en pleno Camino de Santiago donde muchos los peregrinos durante toda la Edad Media transitaban por sus tierras.
En este momento de esplendor, toda la cristiandad deseaba visitar la tumba del Apóstol y disfrutar de la belleza del Camino cada vez en mayor número.
En esta época Camponaraya contó con dos hospitales asistenciales para peregrinos, el de la Soledad y el de San Juan de Fabero, reconocidos por los peregrinos, donde reciben la atención necesaria para poder seguir con su peregrinación.